El abogado Rafael Nieto Loaiza, encargado de defender a Colombia ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos por la demanda en el caso de los desaparecidos del Palacio de Justicia, aceptó que él sabía que “es improbable que Colombia gane esta defensa ante la Corte”. Sin embargo, enterado de lo que se venía, Nieto Loaiza no dudó en basar su contestación negando la desaparición forzada de 9 personas y mucho menos vaciló en recibir la bonificación de $406 millones por sus servicios como jurista.
Así mismo, Adriana Guillén, directora de la Agencia Jurídica del Estado, aceptó que faltando tres días para la fecha límite de respuesta a la demanda, se le encargó el trabajo al abogado Rafael Nieto. Aunque la improvisación estaba a la vista, la agente del Estado defiende la polémica posición que presentó la defensa colombiana; para Guillén, no hay certeza de que todos los desaparecidos del holocausto hayan salido con vida y que sean víctimas de agentes de las Fuerzas militares. De hecho, igual que en la contestación a la CIDH, la funcionaría solo valida la desaparición de dos personas: “no se niega a los desaparecidos Irma Franco y Carlos Horacio Urán porque hay registros gráficos, documentales y testimoniales” afirmó Guillén.
Por su parte, Rafael Nieto Loaiza quien fue criticado por haber utilizado en una parte de la contestación, los mismos argumentos que aplicó hace algunos años en el caso Santo Domingo, juicio que perdió, no negó que hay citas similares. Para el jurista sus conceptos se basan en que así hayan condenas internas, esto no significa que haya responsabilidad internacional, y el país tenga que responder ante la CIDH.