Por:José Macareno -CNAI Sucre –
Con muchas preguntas, incertidumbres, contrastes y descontentos transcurrió la jornada de entrega de títulos de propiedad a familias campesinas de los municipios de Morroa y Ovejas, departamento de Sucre, que habían sido despojadas de sus tierras. El acto se realizó el 30 de abril en el predio La Bañadera Vereda Cambimba, municipio de Morroa, y asistieron el ministro de agricultura, Juan Camilo Restrepo; el director de la Unidad de Restitución de Tierras, Ricardo Sabogal; el director de la Unidad en Sucre, Fabio Camargo; el gobernador de Sucre, Julio Guerra, el alcalde de Sincelejo, Jairo Fernández, y como invitado especial el administrador general de Usaid, Rajiv Shahla.
En sus intervenciones, el gobernador de Sucre, el ministro de agricultura y el administrador general de Usaid, expresaron la felicidad del gobierno por el deber cumplido, pero en los restituidos se manifestó la incertidumbre frente al tema de la seguridad para ellos y sus familias como lo aseguran cuando solicitan del Estado protección pero también ayuda para iniciar un nuevo proceso en su vida luego de muchos años de haber abandonado sus tierras.
En el acto de restitución se presentó un grupo de personas que aseguraron que no son despojadores sino compradores de buena fe y que si bien compraron esas tierras en tiempos del conflicto ellos sacrificaron sus pocos recursos para esto y fueron negocios sin ninguna presión que contaron con el aval del INCODER, por lo que consideran se les está violando sus derechos.
Al respecto, los dirigentes de organizaciones campesinas han dicho que si bien respaldan el proceso de restitución ven con reserva el hecho que los fallos emitidos en las sentencias cobijan a compradores que son campesinos que adquirieron esas tierras luego de muchos años de estar abandonadas y contaron con el beneplácito de los titulares y del INCODER, mientras que aquellos que lograron grandes extensiones bajo presión no se le está tocando.
La situación de la zona en donde los campesinos fueron restituidos es relativamente tranquila en materia de orden público; el abandono estatal y gubernamental al que sigue sometido el territorio de los Montes de María se refleja en la precaria condiciones de las vías que desde los cascos urbanos van a las tierras restituidas, además de la falta de servicios públicos y de recursos para laborar las tierras. Son estos los obstáculos inmediatos que dificultan este nuevo comienzo.
Para el ministro de Agricultura la restitución de tierras es el resultado de un gran esfuerzo y que tiene una concreción en Sucre, no solo en Morroa y los Montes de María. «La mazorca de la justicia comienza a desgranarse a favor de las víctimas en los fallos proferidos», dijo.
Según el ministro Restrepo, en los Montes de María hay seguridad para los procesos de restitución de tierras.»Se entregaron los fallos que la justicia acaba de proferir para el caso de Pechilín. Sucre fue muy adolorido y golpeado en la época de tanta violencia que hubo y una expresión de esa violencia fue el despojo de esas tierras», sostuvo el ministro.
Destacó que se han hecho acompañar de las mejores normas de prudencia en compañía de la Fuerza Pública, tanto del Ejército, la Policía y la Armada para garantizar la seguridad a los campesinos restituidos.