Cacao producido por familias que sustituyeron cultivos ilícitos llega a Europa

12 toneladas producidas por 276 familias colombianas fueron compradas por la multinacional europea Valrhona, gracias al apoyo de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito –UNODC.

Los empresarios de Valrhona visitaron en 2013, las 11 asociaciones que forman el proyecto Montebravo en Colombia, donde conocieron el compromiso de los productores que cultivan en la zona norte del departamento de Chocó, cerca al golfo de Urabá.

Las tres organizaciones que consiguieron la exportación, después de cumplir los estándares de calidad, fueron: ASIPAD, ASOPROANES y APROCAMALOSAN.

Algemiro Gallego, director ejecutivo de Montebravo, dijo sobre la exportación a Valrhona realizada el pasado mayo: «fue un poco difícil, porque hay que enseñarle mucho al productor, pero sin duda la exportación es una posibilidad de seguir adelante con esta empresa. Hay que aprender, de todas formas demostramos calidad y compromiso con los clientes en Francia». Además precisó, «Sí hay un futuro: es claro que no sabemos todo, pero lo aprendemos».

UNODC, desde el programa de Desarrollo Alternativo, generó una opción que, con el Programa Familias Guarda Bosques, permitiera una posibilidad lícita de producción conocida como «Montebravo». El proyecto tiene como objetivo principal brindar condiciones para el manejo racional de recursos forestales en bosques naturales, con fines productivos y no consuntivos, y mejorar la seguridad alimentaria bajo diseños agroforestales con un impacto inmediato en la economía y el bienestar familiar.

Julieth Osorio Gómez, profesional comercial de Montebravo, también se refirió a la compra de la reconocida multinacional de chocolates: «fue una exportación que hizo muy felices a nuestros agricultores. En Colombia no se paga por la certificación y cuando exportas un producto por tenerlo certificado vale más, y eso es muy importante para las familias productoras».

Montebravo, como asociación productora, vincula al proyecto familias que han sembrado cerca de 1735 hectáreas de cacao, pertenecientes a comunidades indígenas (Resguardo Indígena Kuna de Arquía), afro-descendientes, campesinos y familias desplazadas. Durante la ejecución del proyecto se conformaron las 11 organizaciones de productores agroforestales, con el fin de disminuir la dependencia económica de la producción de hoja de coca en la zona.

«Queremos salir internacionalmente con las asociaciones productoras, seguir uniendo familias y regiones para fortalecerlas como en el caso de Montebravo», agregó Julieth Osorio.

Tomado de: http://www.reconciliacioncolombia.com/historias/detalle/253