Con el apoyo de 119 votos en Cámara de Representantes; y de 69 en Senado, el Legislativo aprobó la ley de amnistía e indulto que beneficiará, además de guerrilleros, a agentes de Estado y terceros civiles que no participaron de graves crímenes de guerra.
En tiempo record, las plenarias de Cámara y Senado, en simultáneo, aprobaron en último debate el proyecto de ley de amnistía e indulto con el que se marca el primer paso de la implementación del acuerdo de paz alcanzado por el Gobierno y las Farc. Ahora, el texto pasa a sanción presidencial, luego de la cual entrará en vigencia y favorecerá apróximadamente a los más de 6 mil combatientes de las Farc, 4 mil guerrilleros presos, 1.200 uniformados detenidos y cientos de líderes sociales acusados de pertenecer a grupos armados.
Y es que a partir de que el presidente Santos sancione esta ley los combatientes de las Farc y los militares y policías investigados y condenados por delitos relacionados, directa o indirectamente con el conflicto armado, podrán resolver su situación jurídica y sentir los beneficios que se derivan del acuerdo de paz. “No quiere decir esto que se va a beneficiar a responsables de graves crímenes de guerra, ni a infractores del Derechos Internacional Humanitario. Estas personas tendrán que comparecer ante la Jurisdicción Especial de Paz para aportar a la verdad, reparar a las víctimas y recibir las sanciones que los jueces impongan”, explicó el representante del Polo, Alirio Uribe.
Por su parte, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, explicó que se ha dado un paso fundamental en la implementación del acuerdo de paz y que con esto se brindan las garantías jurídicas para que en 150 días el país tenga unas Farc desarmadas, desmovilizadas y convertidas en partido político. “El Congreso ha demostrado su compromiso con la paz de Colombia. Es una buena noticia de fin de año”, expresó. Cristo también puntualizó que el Congreso volverá el próximo 16 de enero para debatir el Acto Legislativo que crea la Jurisdicción Especial de Paz.
Sobre la ley de amnistía, Cristo destacó que en esta ley también se otorgan beneficios jurídicos a los miembros de la Fuerza Pública. “Miles de soldados y policías recibirán la renuncia a la persecución penal o la libertad condicional”, y añadió que “no contempla el beneficio de la amnistía para quienes hayan cometido crímenes de guerra, genocidio o crímenes de lesa humanidad”. De igual manera, Cristo preciso que en los próximos días las Farc tendrá que entregar el listado de sus miembros y se iniciará el estudio de quiénes son sujetos de amnistía y quienes serán trasladados a las zonas de concentración, donde pagaran las sanciones de restricción de la libertad.
De nada sirvieron las protestas del Centro Democrático, que insistieron que esta ley es el festín de la impunidad, que el narcotráfico se entenderá como conexo al delito político y que el Gobierno no respetó el resultado del plebiscito del 2 de octubre. Al final se salieron de la plenaria y no votaron la ley. Lo que permitió que las mayorías del Gobierno se impusieran cómodamente, dándole paso a la iniciativa que ahora tendrá que ser sancionada por el Presidente y luego estudiada por la Corte Constitucional para avalar si cumplió o no con la normatividad nacional vigente. Con la aprobación de esta ley de amnistía el proceso de paz de su primera paso en la implementación, y el Congreso termina su labor por el año 2016.
Ver en El Espectador