En apenas una semana el Ejército de Liberación Nacional –ELN- se ha pronunciado tres veces en torno a los asesinatos de líderes sociales, cese al fuego y seguridad para los colombianos que protestan y buscan hacer valer sus derechos.
Por una parte el pasado domingo 4 de junio por medio de la “Nota de prensa N° 4 de la Delegación del ELN para los Diálogos” se hizo un balance de las ACTIVIDADES DE LA MESA DE CONVERSACIONES DE QUITO en la que se informó que ambas delegaciones (del Gobierno nacional y del ELN) han continuado trabajando en los 2 carriles principales de acuerdo: a) la participación y dinámicas y acciones humanitarias (5f), y b) en los 3 temas complementarios: pedagogía y comunicaciones para la paz; Grupo de países de apoyo y Fondo, y desminado humanitario. Afirmando que “en estos temas complementarios se avanzó, en la elaboración de la propuesta de pedagogía y comunicaciones para la paz”.
De igual forma se anunció que no se había logrado “poner en marcha las llamadas Audiencias Preparatorias, las que están consideradas como un paso preliminar de consulta, con distintos sectores de la sociedad, acerca de sus experiencias y propuestas en torno a las formas y mecanismos de participación de la sociedad”. Previendo que antes de septiembre (cuando el Papa visite el país) se logre concretar un Cese bilateral al fuego y se realicen la ya mencionadas Audiencias que, como el ELN expone, permitirá afianzar el proceso y renovar la esperanza de encontrar soluciones políticas al conflicto colombiano.
La insurgencia en dichos encuentros manifestó su rechazo y su “posición crítica frente al asesinato de líderes sociales en el país” y la preocupación que tienen de que la “represión sea la respuesta a las exigencias de las comunidades” que se han movilizado en todo el país para reclamar sus derechos. “La protesta social, es una forma de participación legitima, que el régimen sigue tratando con la estigmatización y la violencia” dicen en la Nota de prensa.
Así mismo este martes 6 de junio se emitió el Comunicado Conjunto Nº 3 en el que informan a la opinión pública que además de trabajar los puntos estipulados en la Nota de prensa del domingo 4, también se ha trabajado en la “formalización de la creación del Grupo de países de apoyo, acompañamiento y cooperación a la Mesa de conversaciones (GPAAC)” que aparecen en la agenda del 30 de marzo de 2016.
Las delegaciones en este comunicado hacen mención de los acuerdos a los que llegaron:
- Constituir un equipo conjunto de pedagogía y comunicación para la paz (EPECOP), cuyo objetivo general es promover la construcción de una cultura de paz mediante la generación de confianza y credibilidad, que le dé mayor solidez al trabajo de la Mesa de diálogos (Gobierno-ELN) y de los acuerdos a que se llegue.
- En el marco de este acuerdo, se definió un plan de acción, funciones, criterios, alcances, integrantes y metodología de trabajo del equipo. Adicionalmente, se definió un plan de acción inmediato.
- Para el GPAAC, conformado inicialmente por Alemania, Holanda, Italia, Suecia y Suiza, se han definido los términos de referencia que orientarán su desarrollo.
Igualmente, se ha establecido el fondo de financiación para la Mesa de conversaciones entre el Gobierno Nacional de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional, cuyo objetivo es movilizar contribuciones de la cooperación internacional para financiar, de manera transparente y flexible, los gastos relacionados con el desarrollo de la Mesa.
Finalmente desde Quito, Ecuador, hoy 8 de junio la Delegación de Diálogos de Paz de la guerrilla difundió el Comunicado #0013 que tiene como título “URGE UN CESE AL FUEGO BILATERAL”.
Este comunicado es con base al informe de Human Rights Watch sobre la situación que padecen comunidades del Chocó y el Pacífico Colombiano. Plantean lo siguiente:
- Toda labor de organismos de DD.HH. la valoramos y compartimos la preocupación humanitaria sobre la realidad que viven las comunidades en Chocó, azotadas por la crisis económica, la creciente presencia paramilitar y la judicialización a líderes y lideresas sociales hecha por organismos del Estado, situación que, de no revertirse, amenaza con convertirse en un Genocidio.
- En la zona a la que refiere el informe, se está dando un recrudecimiento de acciones militares que afectan a la población; los hechos que se mencionan son consecuencia de la acción paramilitar con connivencia del régimen y tienen, por lo tanto, un responsable central: el Estado colombiano.
La delegación concluye afirmando que son necesarias las acciones y dinámicas humanitarias como una forma de “rebajar la intensidad del conflicto y las afecciones a la población”.
“Hemos insistido en la propuesta del CESE AL FUEGO BILATERAL, y la de hacer un acuerdo humanitario sobre el Chocó” dicen.