Ironías de la política

Mi compadre Fabio Yesid Castellano Herrera, está enredado en los hilos develados de la politiquería, colocando en entredicho su transparencia, por demás sobresaliente, esa que empezó en la segunda mitad de la década de los 90 cuando apenas era un “pichón” de abogado, recién egresado de la universidad de Cartagena, rumores que motivan el presente artículo.

Su historia política se inicia cuando fue nombrado Director de Damarena, -hoy Establecimiento Público Ambiental de Cartagena, EPA-, para luego ser elegido Personero Distrital del Corralito de Piedra, más tarde nombrado Secretario de Gobierno Distrital y en su cúspide, nombrado Procurador Delegado de la Moral Pública a Nivel Nacional, en el año 2010, cargo de alto turmequé, a mi juicio equiparable a un magistrado de las altas cortes o un concejal de Bogotá D. C.

Carrera política iniciada en los noventa con el grupo “Madera”; movimiento político barrial del sur de Cartagena, San Fernando, María Cano, Nelson Mándela y otros barrios populares, cuyo propósito era dar madera y batazo limpio a los corruptos. Irónicamente terminó siendo el fortín politiquero de un ex concejal de cuyo nombre no quiero acordarme, como dijera Cervantes, menos mal logró retirarse mucho antes de que el comején de la corrupción se comiera la Madera.

Siguiendo su carrera en el entramado mundo de la política, terminó militando en el movimiento del ex concejal y ex senador Javier Cáceres Leal, -quien le ayudó en su ascenso político; de su mano fue asesor de la Comisión Primera del Senado y Procurador Delegado para la Moralidad Pública, eso sí, respaldado por su excelente hoja de vida profesional, su experiencia en el sector público y por supuesto su proba conducta, siendo calificado como uno de los mejores procuradores delegados, datos que pueden constatar con la Procuraduría Nacional.

Importante resaltar que el escándalo de corrupción del otrora Presidente del Congreso de la República en representación del partido Cambio Radical, no salpico para nada al Procurador de la Moral, quien inteligentemente, acorde a sus principios, y a su ética política, decide dar un paso al lado, separándose para siempre de quien fuera su padrino político, asumiendo los costos positivos y negativos de ese tipo de decisiones.

Sin tacharlo de incólume, es de anotar que salió de esa correría política sin cargos en su contra, señalamientos, demandas ni contra demandas, lo que le permite seguir en el juego político con la cabeza en alto. Por lo que da su paso al partido Alianza Verde donde milita hoy, aspirando a la Alcaldía de Cartagena en la pasada coyuntura con el respaldo de su nuevo partido que le dio el aval, luego de pasar todos los filtros protocolarios anti corrupción, en cabeza de la afamada senadora Claudia López. Durante su campaña tampoco fueron acotados actos punibles a su conducta política, personal o familiar.

En su artículo “Hombre de Familia”, del 06 de Noviembre de 2010 en la revista Semana, el periodista Daniel Coronel menciona a Fabio, como cuota de Cáceres, lo que no es ninguna novedad, pero en ningún momento allí ni después, ni Coronel, ni otro periodista, ni algún medio conocido, ni siquiera durante la campaña a la Alcaldía de Cartagena, como estrategia de desprestigio ha publicado nada en su contra, ni ha sido acusado como un funcionario que desfalcó el erario público.

Su narrativa política tiene como paralelo la familia; hijo, hermano, padre, amigo, esposo, deportista, farandulero y mi compadre por supuesto. Dueño de un currículo cultural vernáculo, como corresponde al hombre caribeño, identidad moruna y sello Caribe, que conjuga al hombre con su contexto, la tierra, su música, gastronomía marina, modismos y costumbrismos con el que nace y se crían los de la orilla del mar.

Pienso que la construcción deontológica de tu vida profesional y familiar, son tu mejor carta de transparencia, en este mundo donde los santos roban y los mojigatos son ladrones y depravados, razones que inspiran esta líneas de respaldo al ser humano que he visto sudar cada peldaño de su vida, enfrentando las dificultades de cada circunstancia sin desfallecer, incluido el bello arcanos del bautizo de Tony, mi ahijado, que obviamente no es motivo de estas líneas.

Por lo que conozco y sé, tus bienes económicos y tu poder político, no son los de una persona que tiene las manos untadas de sangre, componendas y desafueros contra el erario público, el capital privado y la vida humana, si hay información oculta por parte de alguien sobre el doctor Castellanos, este es el momento de hacerla pública o calle para siempre, pues como bien dicen los Hermanos Zuletas “no se deben limpiar las uñas con la honradez ajena”.

Como cada crisis trae su oportunidad, vale la pena que la Alianza Verde replantee su afán protagónico, su deseo de crecimiento improvisado en Cartagena y Bolívar, replanteando su quehacer nacional y local, desde la perspectiva de unificar criterios regionales que estimulen su fortalecimiento, en cabeza de liderazgos probos que, se sumaron al partido con base a sus principios.

La luz de la decencia alumbra las buenas conductas y se apaga frente a la corrupción, por lo que esperamos que la claridad jurídica que prima en nuestro Estado de Derecho, reivindique el buen nombre de Fabio Yesid, puesto que no podemos olvidar que los chismes, más que malos entendidos, son una estrategia politiquera para desprestigiar los contrincantes, dejando en el imaginario colectivo lo primero que se escucha, sin que muchas veces se logre aclarar con suficiencia lo perversamente difundido, por lo que no basta con que los que te conocemos, creamos en tu hidalguía, es necesario que el partido, llegado el momento, se pronuncie con contundencia y claridad frente a los hechos.

Por: Luis E. Sánchez Puche
Sociólogo.
Corporación Nuevo Arco Iris