Tras los presuntos excesos cometidos en operaciones antinarcóticos, el Ministerio de Defensa informó que 102 uniformados que prestan sus servicios en la población serán rotados. La apuesta: recuperar la confianza con las comunidades tras la masacre de seis campesinos.
Pasados cinco días de la masacre de seis campesinos que hacían parte de labores de erradicación de cultivos ilícitos en el municipio de Tumaco (Nariño) –hecho agravado por el hostigamiento de la Policía contra una misión humanitaria y de periodistas que indagaba lo ocurrido– este martes el Gobierno Nacional ordenó que 102 uniformados que prestan sus servicios en la población sean relevados, es decir, que sean trasladados a otras poblaciones. (Lea: Tumaco a la espera de justicia tras ataque de la Policía)
Según explicó el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, se trata de una orden expresa del presidente Juan Manuel Santos ideada para mejorar los niveles de confianza de la ciudadanía en la Policía. A esta medida se sumarán una serie de decisiones –desde lo social, lo policial y lo militar– para que las comunidades se acerquen a las autoridades, se combata el crimen organizado (tanto narcotráfico como minería ilegal) y se recupere el control territorial institucional.
“Con el presidente Santos, hemos instruido al señor general Jorge Hernando Nieto, director de la Policía Nacional, para que se adelante un relevo de las unidades policiales en el municipio de Tumaco. Vamos a empezar con 102 unidades policiales: dos oficiales, 20 uniformados del nivel ejecutivo y 80 patrulleros que serán rotados a otros destinos del país”, manifestó Villegas. (Lea también: Suspenden a cuatro policías que habrían disparado en masacre de Tumaco)
El ministro anticipó nuevas rotaciones en la Policía de Tumaco e indicó que, además de un mejor trabajo con las comunidades, la apuesta es porque en Tumaco “no solo se vean nuevos rostros, sino nuevas actitudes en los uniformes policiales para aumentar la confianza”.
Villegas –quien dijo que Tumaco ha sido una ciudad martirizada por la violencia y el crimen organizado– manifestó que, en el plano militar, se intensificarán los esfuerzos para enfrentar al crimen residual de las Farc, “que es activo y peligroso”, así como el crimen organizado, que ha extendido su actividad hasta la frontera con Ecuador y la ribera del Pacífico.
Las acciones se enfocan también contra la guerrilla del Eln, agregó Villegas, quien aseguró que, pese a que se respetará el cese bilateral al fuego vigente hasta enero de 2018, ello no impide que la Fuerza Pública “persiga el delito donde se esté cometiendo y por quien lo esté cometiendo”.
A nivel social, el ministro señaló que el vicepresidente de la República, general (r) Óscar Naranjo, está coordinando acciones para establecer nuevos puentes de diálogo con las comunidades: “Los pobladores necesitan cercanía y mayor atención, por ejemplo, en temas como resolución de conflictos; trabajo con infancia y adolescencia; prevención del consumo de drogas; medio ambiente y protección de comunidades vulnerables”, precisó Villegas.
Por último, el funcionario ratificó la “plena disposición de la Policía y de las instituciones armadas” para contribuir en el avance de las investigaciones que adelanta la Fiscalía en relación al asesinato de seis campesinos y el hostigamiento a tiros contra miembros de una misión humanitaria que indagaba por los hechos. Tales acciones han sido atribuidas, de forma preliminar, a miembros de la Policía. (Lea: “Fue un ataque a civiles, sin justificación”: FLIP sobre hostigamiento a misión en Tumaco)
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