Foto: Prensa ONIC/ Pueblo Arhuaco Minga Por La Vida
El 30 de octubre inició la Minga Por La Vida en el territorio colombiano con el fin de exigir al Estado el cumplimiento de los acuerdos que no han cumplido a pesar de ya estar firmados y pactados.
Desde un inicio en este portal hemos dado a conocer el avance de la Minga y Asamblea:
Se instaló la Mesa de Negociación de la Minga Nacional Indígena por la Vida “por la defensa del territorio, la paz y el cumplimiento de los acuerdos”, este lunes 6 de noviembre, en Monterilla Caldono Cauca.
Más de 100 Pueblos en Colombia unidos en más de 40 organizaciones que hacen parte de la ONIC, junto a MPC, OPIAC, CIT, GOBIERNO MAYOR y AICO instalaron la mesa “con el propósito de concretar el cumplimento a los puntos del Pliego Nacional radicado el 30 octubre 2017”. (Ver Resultado de Encuesta: Minga por la vida)
El pliego de exigencias de esta Minga contiene cinco puntos, que giran en torno a: Garantías y Derechos Humanos; Territorio y Medio Ambiente; Paz Con Justicia Social; Acuerdos Incumplidos y Garantías Presupuestales para el Cumplimiento de los Acuerdos. En la primera emisión del mes de noviembre en el programa radial Sintonízate con la Paz, se habló sobre esta iniciativa. (Ver Minga por la Vida: el Territorio, la Paz y el cumplimiento de los Acuerdos)
El movimiento indígena, como ya se ha mencionado anteriormente, representa a los 102 Pueblos Indígenas de Colombia a través de las organizaciones ONIC, OPIAC, CIT, Gobierno mayor y AICO Por la Pacha Mama. Luego de más de una semana de movilización, el balance no es alentador. Cerca de 20 departamentos ha logrado reunir a los pueblos para la movilización pero en este tiempo la Minga “ha pagado un alto costo de más de 40 heridos y 20 judicializados”, afirman. (Ver Minga por la vida logra acuerdos nacionales y se mantendrá en asamblea permanente)
A estos datos mencionados anteriormente se denuncia que en la mañana de este jueves 16 de noviembre la Comunidad Arhuaca presentes en Asamblea Permanente de la #MingaPorLaVida en Valledupar fue ‘atacada indiscriminadamente por el #ESMAD’, como se registra desde varias cuentas de Twitter.
Desde las comunidades indígenas y sociedad civil, como Corporación nos unimos en la petición, se exigen “garantías para la vida y la protesta”, teniendo en cuenta que la tranquilidad y pasividad con que los pueblos llevan a cabo la Asamblea permanente “los pone en mayor indefensión”; así mismo replicamos lo que los grupos étnicos dan a conocer:
no aguantamos más este mal gobierno y todos sus cómplices, que como han hecho anoche en la plenaria de la JEP en el Congreso de la República, están dispuestos a destruir el futuro de millones de colombianos por mantener su fuero de corrupción e impunidad.
Hacemos un llamado urgente a la comunidad defensora de derechos humanos en el país y a nivel internacional a tomar medidas urgentes para garantizar la atención y el cumplimiento de los acuerdos a las comunidades, a los medios de comunicación y a la comunidad en general, la defensa de los derechos es un deber de tod@s y para tod@s”.
Foto: Prensa ONIC/ Pueblo Arhuaco Minga Por La Vida
Saludos de paz y bendiciones desde Guadalajara, México. Las autoridades colombianas que se muestran ante el Mundo como democráticas deben garantizar el derecho a la protesta a las movilizaciones de los campesinos e indígenas de Colombia. El presidente Juan Manuel Santos Calderón recibió en 2016 el Premio Nóbel de la Paz y tiene la obligación moral con su país y con la Comunidad Internacional de hacer respetar los Acuerdos de Paz entre su gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia. Las FARC han cumplido lo acordado pero ahora sus dirigentes, militantes y simpatizantes están en la mira del paramilitarismo, de la extrema derecha. No es un buen mensaje para las Conversaciones de Paz con el movimiento revolucionario insurgente Ejército de Liberación Nacional. No es un buen mensaje para los jóvenes, para los desplazados, para los desempleados y para los miles de hombres y mujeres que en Colombia han sido olvidados y explotados. La Paz con Justicia Social debe ser una Tarea Permanente de la Mayoría de los Colombianos. Atentamente, Fernando Acosta Riveros