Por Walter Aldana
La versión número 26 de este reencuentro del pueblo negro del Litoral Pacífico, está precedido de un discurso pronunciado por el presidente Gustavo Petro en la cumbre del Pacífico, donde concluyó con una frase que dibuja en el imaginario colectivo los vientos del bello Litoral Pacífico, hacia Colombia, sentenció: «este país estuvo gobernado por los descendientes de los esclavistas y a partir del pasado 19 de junio, está dirigido por los descendientes de los esclavos».
Y es que señaló el Sr. Presidente el racismo como la causa de la pobreza de este litoral como consecuencia del trato revanchista del sector andino, ante la rebelde actuación de buscar la libertad en palenques libres, en estos territorios a orillas del mar.
Dijo también que la prioridad de actuaciones e inversiones del gobierno nacional será este litoral profundo, porque es vergonzoso como nación tener empobrecida la región del pacífico. Y me he preguntado muchas veces cómo son nuestras hermanas y hermanos tan felices aún en medio de esta situación, y para encontrar respuestas, definitivamente hay que ir al festival Petronio Alvarez. Tres grandes secciones, bebidas tradicionales (entre otras, arrechón, curado, tumba catre), cocina propia (camarones, langostinos, jaiba, etc ) y pasarela de moda propia, con los colores y diseños característicos del pueblo afro, ríos de personas nacidas en este Litoral, más habitantes del sur del país entraban y salían de la unidad deportiva Alberto Galindo, se dice que acoge ca año de 100 a 200 mil visitantes.
El Petronio es el grito de rebeldía, es el encuentro de quienes desde su ancestralidad se reconocen, estén habitando el sitio que sea, pues se trasladaron con su cultura, sus religiones y prácticas.
Definitivamente es histórico, se discute la creación de una Región de planeación y gestión, en el camino hacia un departamento del litoral pacífico. El Petronio es: alegría, encuentro, música, comida, moda, identidad y sentido de pertenencia.