Autor: Tejido de Comunicación y Relaciones Externas para la Verdad y Vida
El 17 de junio de 2013, inició el XIV Congreso del Consejo Regional Indígena del Cauca – CRIC, en Kokonuko, Zona Centro, departamento del Cauca, Colombia. Alrededor de 5000 participantes se instalaron en el “Territorio del duende”, lugar que no había acogido un congreso, máxima autoridad del CRIC, desde el año 1978, con el V Congreso de la organización regional, donde se planteó el mandato de la educación propia.
La apertura fue en primer lugar espiritual, abriendo el camino, pidiendo permiso a los espíritus, con el ritual de rotación en el cual se saludó al padre Sol, a los puntos Sur, Norte, Occidente, Oriente, hacia el centro. Los mayores y los niños cantaron y danzaron para la naturaleza, para nuestra Madre Tierra. Todos y todas se arrodillaron para acariciarla y sentir sus energías de dadora de vida.
Los himnos cantados por los estudiantes del Centro Educativo se elevaron desde la tarima hacia las verdes montañas del territorio del pueblo Kokonuko. Resguardo que desde el nacimiento del CRIC, dio una lucha fuerte para recuperar las tierras robadas por los terratenientes, para que hoy la mayoría de las fincas estén en manos comunitarias. La comunidad reunida también aplaudió las danzas tradicionales de los niños y de las guardias, saltando al ritmo de la música ancestral.
El Gobernador de Kokonuko, Darío Tote, dio la bienvenida a las 11 asociaciones del Consejo Regional Indígena del Cauca. “No hemos venido a aprobar por aprobar” expresó, invitando a la comunidad a reflexionar, pensar sin afán, para poder decidir y construir mandatos desde la base. Llamó a defender de manera firme los lineamentos que se plantearon desde el año 1971, cuando se creó el CRIC. Recordó el camino que llevó a tejer, poco a poco, formas de organización propias para no dejarse engañar por las estrategias de cooptación que vienen desde arriba, con las transferencias, los proyectos, el electoralismo, entre otras.
Todas las autoridades tradicionales, en los saludos que dieron a la comunidad desde las diferentes asociaciones, retomaron esas preocupaciones, en particular, la necesidad de participación comunitaria para fortalecer las decisiones colectivas. Invitaron también a recordar la historia, en particular a “los mayores que lucharon y están olvidados”, y evaluar estos 42 años de lucha del CRIC, así como los 13 Congresos que se han realizado hasta hoy.
En este sentido, los ex-combatientes del Quintín Lame y del M-19, de igual forma, saludaron al Congreso y recordaron el papel que jugaron en las luchas, denunciando esa “mano invisible que quiere borrar la Historia que nosotros hicimos”. Saludaron la fuerza del proceso indígena regional e hicieron un llamado a trabajar juntos, todos los movimientos sociales, para “sacar adelante a este país”.
Tanto en los saludos de las autoridades como en el análisis de contexto presentado por el Consejero Mayor del CRIC Jesús Chávez, el presidente y el secretario de la Organización Nacional Indígena de Colombia ONIC, se destacaron temas claves en la actualidad del proceso, así como temas estructurales que afectan el territorio y la autonomía de los pueblos.
El territorio es la casa grande, permite la pervivencia de los pueblos, hace parte del ser indígena y el ser indígena hace parte de éste. El CRIC empezó con solo cinco autoridades, cinco bastones de mando, y ahora contamos con 120 autoridades en el conjunto del departamento. Fueron 42 años de recuperación de los territorios. El territorio creció mucho, sin embargo es necesario seguir recuperando más, para garantizar la autonomía de los pueblos y su soberanía alimentaria. Hay que seguirlo recuperando porque el territorio está en riesgo.
“Cambió el enemigo pero sigue el mismo interés” planteó el Consejero Chávez. “Ahora el interés económico del gran Capital nos sigue poniendo en riesgo […] y ese monstruo del capital internacional es más peligroso que los terratenientes” dijo. La imposición del sistema capitalista pasa por la entrada de las multinacionales de extracción minera, por las leyes de despojo como los Tratados de Libre Comercio que se imponen por el terror de la guerra. Tenemos que “hacer frente a las multinacionales de extracción” planteó Chávez, y no podemos confundirnos, empezando nosotros mismos a sacar oro, la sangre de nuestra propia Madre.
Por su parte, Juvenal Arriera, secretario general de la ONIC, hizo una amplia lectura de contexto sobre los impactos de las políticas externas y de la crisis del modelo hacia nuestros pueblos. Mencionó que debemos avanzar en el debate sobre el modelo económico, pero que no nos podemos quedar sólo en la retórica. «Colombia está firmando 17 tratados de libre comercio con diversos bloques económicos. Gran parte de América Latina está concesionada al extractivismo. En el contexto actual estamos enfrentando una recolonización». Pues “la plata no es garantía de nuestra pervivencia”, señaló el Consejo Mayor del CRIC, porque la verdadera riqueza es cultural, es la de la huerta, la del pensamiento.
La división del movimiento es otra amenaza al proceso indígena. Y es múltiple. No nos podemos dejar dividir ni por el Gobierno, ni por la guerrilla, ni por la implementación de organizaciones paralelas, hijas de los que quieren acabar con el movimiento, plantearon las autoridades. Tampoco podemos dejarnos confundir por los politiqueros, ONG o personas externas que vienen a asesorar el proceso y que “vienen a jugar con las necesidades de la gente”, dejó claro el Consejero Mayor. Y en el contexto actual, que todos miran como histórico, donde se están realizando los diálogos de Paz entre la Guerrilla y el Gobierno, hay que seguir unidos, desde las bases para construir desde abajo. Así mismo se destacó que mientras se negocia en la Habana, el pueblo es él que está pagando la guerra.
Luis Fernando Arias, presidente de la ONIC, expresó por su lado que «es importante que se firme rápido el cese al fuego que se negocia en La Habana, porque así nos quitamos un peso de encima. Pero como en esas negociaciones no vemos cambios estructurales, las transformaciones sociales que necesitamos los pueblos, las debemos hacer nosotros desde nuestros territorios. ¿Por qué será que los terratenientes no han dicho nada frente a la reforma agraria?. ¿No será que no han tocado sus intereses?”. Eso nos conforta en la búsqueda de una paz desde abajo, que no se puede conseguir sólo con el cese al fuego, sino con la participación de los movimientos sociales, una paz desde los pueblos para los pueblos y no desde arriba, para servir los intereses de los pocos que acumulan las riquezas.
Y para eso se expresa que el movimiento indígena debe dialogar y conversar con los otros sectores sociales, pues, como se dijo en las ponencias, el CRIC no se opone a la autonomía de los afrodescendientes con los consejos comunitarios, ni a las reservas campesinas. Pero es necesario hablar esos temas con claridad, desde la comunidad, para poder crear y fortalecer las alianzas entre pueblos, elemento fundamental para seguir de pie en lucha.
“La conciencia es lo que hay que defender”. Y para eso hay que revitalizar la participación de las comunidades, necesaria para enfrentarse a esas amenazas, pues si la organización solo tiene cabeza, pero ha perdido sus pies, ya no se puede caminar más, ni la palabra, ni la resistencia. En ese sentido, se planteó la necesidad de hacer claridad en el tema electoral y orientar desde las comunidades, las que deciden, para que ese tema no se vuelva una nueva amenaza para el proceso, dividiéndonos aún más por los mismos intereses de poder que los de arriba.
No se alcanzaron a abordar las ponencias para evaluar los diferentes temas trabajados en el CRIC: Tierra y Territorio; Económico-ambiental; Político-Organizativo; Derechos Humanos, Conflicto Armado y Paz; Salud; Educación; Comunicaciones, Propuesta CRIC frente a los ODM y el Auto 004. Se espera iniciar con las respectivas ponencias de estos temas mañana, a primera hora.
Mientras tanto, los grupos musicales y de danzas llegaron a sembrar la alegría, antes de presentar el documental “PalabrAndando: caminos del saber para defender la vida”, sobre la comunicación que se plantea desde los pueblos indígenas, y en particular, desde el Foro Nacional de Comunicación Indígena, realizado en noviembre de 2012.
Obviamente, los temas expuestos en estas intervenciones serán debatidos por las comunidades de las once zonas en estos tres días, durante los trabajos en comisiones, para que los mandatos de ese XIV Congreso sean el reflejo de lo que opinó, pensó y decidió la comunidad.