El próximo lunes, 9 de noviembre, Vicenç Fisas, director de la Escuela de Cultura de Paz de la U. Autónoma de Barcelona, presentará su nuevo libro sobre negociación en conflictos armados.
Este evento dará lugar a las 5:45 p.m, en la Calle 40 Nº 6-23, Edificio Gabriel Giraldo, 9º piso, Salón Sur de la Pontificia Universidad Javeriana y contará con la participación del Sr. Lars Ole Vaagen, Embajador de Noruega en Colombia, María Jimena Duzán, periodista, y Pedro Valenzuela Gruesso, profesor titular, Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales, U. Javeriana.
El tema central del evento será el actual proceso de negociación con las FARC. Cabe resaltar que gracias al apoyo del Norwegian Peacebuilding Resource Centre – NOREF, se dará a conocer, “Diplomacias de paz: negociar en conflictos armados”, libro que refleja el estudio que debe hacer un analista para encontrar los factores que rodean un proceso de paz, como lo es el motivo por el cual los grupos insurgentes optan por usar las armas para ser escuchados y el discurso que emplean para que en el presente den pasos hacia a delante siendo actores que construyan paz.
En la reflexión, sobre el libro, hecha por el mismo autor se expone lo siguiente:
Hace bastantes años, cuando mi hija pequeña tendría unos 14 años, me regaló un dibujo acompañado del lema siguiente: “Guerra sin escopetas. Luchad escritores y poetas”. Solo recientemente supe que lo había copiado de un grafiti callejero, pero da igual. Lo tengo colgado a la izquierda de mi ordenador, y me recuerda siempre el desafío que tienen los guerreros, habituados a las armas, para continuar defendiendo sus ideales por otros medios, como lo hacen los escritores y poetas. Y de ahí también el título de este capítulo. Lo planteo en forma de pregunta: ¿Pueden los guerreros visualizar la paz, con lo que ello supone de un necesario cambio de mentalidad?, ¿Pueden los guerreros hacer suyas las palabras de Nelson Mandela, al recoger el premio Nobel de la Paz, cuando dijo: “Hablamos aquí del reto de las dicotomías de la guerra y la paz, la violencia y la no violencia, del racismo y la dignidad humana, la opresión y la represión, la libertad y los derechos humanos, la pobreza y liberación de los que padecen carencias. Nos encontramos hoy aquí como nada menos que representantes de millones de los nuestros que se han atrevido a levantarse contra un sistema social cuya esencia misma es la guerra, la violencia, el racismo, la opresión, la represión y el empobrecimiento de un pueblo entero”?
En la historia de los procesos de paz, hay varios ejemplos de líderes o mandos importantes de grupos armados que, normalmente en un proceso más o menos corto, han observado el horizonte con otros ojos, se han maravillado ante la salida o la puesta del sol y han sido capaces, no solo de admirar la naturaleza, sino también de ver la humanidad que hay detrás de cada individuo, aunque sea el enemigo en términos militares. Normalmente este proceso va ligado a una mirada hacia el futuro, y a interrogarse sobre lo que se ha conseguido hasta aquel momento mediante el uso de las armas, y a veces por bastantes décadas. Una respuesta sincera plantea cuantificar el número de bajas mortales, propias y ajenas, la desestructuración de comunidades, los desplazamientos masivos y cosas similares, nada creativas, solo destructivas. Es el interrogante gandhiano sobre los medios utilizados, generadores de terror, de odio y de repulsa, y que cuestionan las fantasías sobre si el grupo armado es la expresión del pueblo alzado en armas, o la viva representación de los movimientos populares. Hay, en los grupos armados, una tremenda facilidad de auto engañarse durante largo tiempo en este sentido, tratando a los movimientos sociales y populares como sujetos infantiles y desprotegidos, que necesitan del amparo de un grupo armado. Despegarse de esa falsa creencia no es fácil, pero es condición indispensable para que, cuando se entra a negociar, sea el propio grupo, y nada más, lo que se ponga en la balanza de los activos, aunque tengan cierto apoyo social. (Ver completa la reflexión en Cuando los guerreros visualizan la paz).
La Escuela de Cultura de Paz de la Universidad Autónoma de Barcelona, la Embajada de Noruega en Colombia y la Pontificia Universidad Javeriana, hacen esta invitación, invitación abierta a todo público.
El director de le Escuela de Cultura de Paz recomienda dos canciones que manifiestan que #paralaguerranada, una de ellas es:
La segunda es: Marta Gómez – Para la guerra nada_Video 2
A donde puedo inscribierme para asistir a la Universidad Javeriana al lanzamiento del libro, abrazos.
No es con previa inscripción pero el sr Vicenç Fisas recomienda llegar a tiempo: «La sala no es muy grande, así que no se demoren»