Diferentes movimientos, plataformas y organizaciones, convocan a los colombianos a participar de la “Vigilia por la Paz y la implementación de los acuerdos”.
Este 02 de octubre dio la oportunidad a los colombianos de reflexionar como nación sobre la construcción real de la paz y emprender con más vigor el camino de la reconciliación que pase definitivamente la página de la guerra en Colombia. Surge así la oportunidad de sellar el tratado de paz de forma definitiva, desenmascarando las falacias de quienes pretenden prolongar la confrontación por temor a que se conozca la verdad.
Las movilizaciones recientes del pueblo colombiano señalan la voluntad de paz de miles de personas que abrazan la posibilidad de un futuro sin guerra y la construcción de una patria con justicia social; más allá de las campañas engañosas y manipuladoras, triunfa el deseo de paz y concordia de las gentes del común que desde las más diversas expresiones y orígenes reclaman el derecho fundamental de vivir en un país en paz.
La población de Conejo, La Guajira, acogen con entusiasmo la iniciativa de realizar una vigilia simbólica por la implementación definitiva de los acuerdos y la construcción de la paz estable y duradera.
La dinámica es llegar a los campamentos de la insurgencia de las FARC-EP, donde lanzarán un llamamiento a la reconciliación, un Pacto Caribe por la Paz que supere el escepticismo y abra la posibilidad de derrotar la guerra para siempre.
La cita será en el corregimiento de Conejo, jurisdicción de Fonseca, en La Guajira, este 31 de octubre, a las 7 am. De ahí habrá marcha en peregrinación por la paz hacia los campamentos insurgentes. Quienes asistan deben disponer de alimentos y menaje (plato, cuchara y vaso), en la montaña ubicarán espacios para cocinar.
También se invita a llevar equipos deportivos, grupos musicales y folclóricos, muestras de pintura, poesía, camisas y banderas blancas, banderas de Colombia, pancartas y todo tipo de manifestaciones espirituales y artísticas populares que expresen la ilusión y deseos de construir un futuro sin guerra. El Caribe abraza la paz y, sin distingos, a todos los hijos de Colombia.