Por Fredy Escobar Moncada
Los mensajes iniciales del gobierno entrante indican que la cuestión social tendrá una oportunidad en el próximo Plan Nacional de Desarrollo 2023 – 2026; la nueva administración presentará en este instrumento su manera de adoptar y reorganizar la herencia asistencialista, sectorial, poblacional y territorial de la estructura del Estado colombiano para intervenir los problemas sociales; incluye la forma de agrupar y distribuir el presupuesto que debe crecer con el propósito de impactar la pobreza y la desigualdad. Hay expectativas del pueblo pobre con el gobierno entrante y la manera de ambientar la planeación en condiciones distintas a las anteriores.
Según el DANE, las clases altas por sus ingresos son el 1.8% de la población mientras que la clase media es el 27%, la vulnerable el 31% y la clase pobre es el 39%. Para intervenir esta realidad que ocupa los niveles más negativos del planeta, el Estado cuenta con 1.318.729 servidores públicos: 31% son uniformados, es decir 410.459, mientras que el 25% son docentes, o sea 333.287. La diferencia de 77.172 policías y solados más que docentes se notó en el Paro Nacional de 2021, cuando el pueblo exigió educación y el Estado ofreció represión; este hecho popular reeditó la cuestión social al ubicarla en el lugar de causa fundamental de conflictos violentos en Colombia.
El PND será además una oportunidad para escuchar las diferentes explicaciones sobre la pobreza y la desigualdad, que también han alimentado el conflicto al no encontrar consensos sobre las causas y consecuencias de estos problemas sociales. El dirigente de los industriales, por ejemplo, convoca a hacer “de esta una oportunidad para avanzar en lo social a tiempo que fortalecemos nuestra economía.” ¿Qué entenderá la derecha por fortalecer lo social? Llevamos 30 años de economía neoliberal donde la mejor política social es no tener política social y confundiendo los intereses nacionales, con sus propios intereses en la economía.
¿Incluye lo social fortalecer la economía con el aumento importante del salario mínimo? ¿Fortalece la economía distribuir 3 millones de hectáreas y formalizar 7 millones? ¿Qué entendemos por lo social, cuánto presupuesto requiere y cuáles son sus fuentes? Las respuestas han generado conflictos por no encontrar el ambiente democrático para dirimir las diferencias existentes en el tratamiento a la desigualdad y otros problemas sociales. Hasta ahora actores destacados del régimen dicen respetar la democracia que eligió el gobierno entrante. Veremos si el respeto incluye cambiar su economía para avanzar en otro desarrollo que considere lo social en términos integrales y no un sector que se atiende coyunturalmente en una explosión controlada.